6 de febrero de 2008

Reposo del alma



Hay tormenta en el cielo.
Oscuros nubarrones presagian el chubasco...

Desde el mínimo lugar de mis deberes,
soy apenas un aprendiz de alma en retirada...

En la lejanía del horizonte,
trepita mi necesidad,
aúlla en rara sinfonía
este palpitar ascelerado,
pidiendo descanso.

Y en medio de una ventolina limpiadora,
aparece la claridad del firmamento,
diáfano y fresco...

Es desde aquellas latitudes
donde la intemperie de mi alma,
encuentra la gloria del reposo.